Nadie está libre de cometer un error públicamente, pero cuando quienes lo cometen son artistas famosos frente a miles o millones de personas, todo puede pasar, incluso terminar con una prometedora carrera musical o ser demandado por las más extrañas razones.
Repasa con nosotros este conteo sobre diez de los más épicos fails protagonizados por reconocidas celebridades del mundo de la música.
10. Las múltiples caídas de Lady Gaga
De todo le ha ocurrido en escena a la excéntrica intérprete de Poker face debido al tremendo despliegue de energía en cada uno de sus shows. A eso debemos añadir esas inmensas plataformas sobre las cuales realiza las más apasionadas interpretaciones. Una de las más peligrosas ocurrió el año 2011 cuando Gaga intentó subir a su piano en pleno clímax del concierto, desplomándose aparatosamente hasta caer debajo del instrumento. Pasaron minutos antes de que sus fans pudieran comprobar que la artista estaba en condiciones de continuar. ¡Pobre, Gaga!
9. Un golpe bajo para Harry Styles
Los chicos ingleses del momento reciben muestras de cariño por millones. Y lo que comenzó como una de ellas terminó siendo uno de los más memorables fails sobre el escenario para Harry Styles. One Direction se presentaba en la ciudad escocesa de Glasgow, cuando una de sus fanáticas quiso hacer un regalo muy especial a sus ídolos lanzando el par de zapatos que llevaba puesto. Lo que no calculó fue uno de los calzados aterrizaría justo en el entrepierna de Styles, quien se retorció de dolor durante varios minutos sobre el escenario. Y ese es solo uno de los muchos que ha tenido… como puedes comprobar en el vídeo.
8. Problemas técnicos para Adele
En la última edición de los premios Grammy, la cantante británica Adele sufrió uno de los mayores bochornos de su carrera. La artista se disponía a interpretar el tema de su nuevo disco All I ask, rodeada de una atmósfera íntima que aseguraba las lágrimas de los presentes. Lo que nadie presagiaba era que el audio de la presentación iba a fallar épicamente de principio a fin. La artista ignoró los evidentes problemas técnicos y continuó interpretando hasta el final, lo que le ganó los aplausos del público a su profesionalismo y valentía.
7. El pantalón rasgado de Lenny Kravitz
Hace pocos meses, Kravitz vivió un vergonzoso momento en uno de sus conciertos. El cantante realizaba sus reconocidos sexys movimientos en un masivo recital en la capital sueca, cuando de pronto su pantalón se rasgó en el entrepierna dejando sus partes íntimas completamente al descubierto, pues como todo un sex symbol, no llevaba ropa interior. Y él pareció disfrutarlo…
6. ¡Madonna cae!
La reina del pop ha sufrido todo tipo de percances durante su larga carrera. En este ránking recordamos la caída que sufrió el año pasado en la entrega de los British Music Awards producto de un aparatoso vestuario que le complicó demasiado la vida durante la interpretación de su último hit, Live for love. La estrella rodó por los escalones del escenario, pero dignamente se levantó con ayuda de sus bailarines y continuó cantando, demostrando un profesionalismo a toda prueba.
5. El vómito de Justin Bieber
El canadiense en conocido por realizar playback en sus presentaciones en vivo, situación que no puede desconocer luego del épico fail de su concierto en Arizona en 2012. En medio del show, Bieber tuvo que detener su actuación sobre el playback producto de unas repentinas e intensas náuseas. El ídolo juvenil vomitó sobre una de sus bailarinas mientras de fondo seguía sonando la canción. Luego de acontecido el incidente, no le quedó más que pedir disculpas a todas sus seguidoras. Por supuesto, ellas lo perdonaron.
4. La flauta mágica de Katy Perry
Corría el año 2011 y Katy Perry ya tenía varios epic fails a su haber. No conforme con eso, se lanzó a la aventura de fingir que tocaba a la perfección una flauta en medio de uno de sus temas. Todo iba perfecto, el público estaba maravillado con la supuesta destreza de la artista con el instrumento, situación que le hizo bajar la guardia mientras la pieza musical de fondo siguió sonando sin que sus labios estuvieran cerca del aparto. Perry sólo atinó a fingir un llanto infantil lleno de rabia y a romper la flauta con sus propias manos.
3. Christina Aguilera olvida el himno nacional
Nadie puede desconocer el talento de la artista norteamericana, sin embargo debemos incluirla en este listado por su tremenda metida de pata durante su interpretación del himno nacional estadounidense, nada menos que en el inicio del Super Bowl de 2011. La cantante, quien daba el vamos a la fiesta deportiva más famosa del país del norte, cambió la letra del himno patrio en varias partes dejando estupefacta a toda una nación. Menos mal que ésto no le ocurrió en algún otro país en donde le pudiese haber costado ¡hasta la cabeza!
2.El fin de Ashley Simpson
Hace una década que ocurrió este desastre para la hermana menor de Jessica Simpson, que muchos catalogan como el fin de su incipiente carrera musical. La rubia fue invitada al famoso show de la TV norteamericana Saturday Night Live, en donde interpretó a la perfección su primer gran hit, Pieces of me. Todo iba bien hasta que llegó el turno de la segunda canción y en medio de ésta, comenzó a sonar la pista de la primera ocasionando un verdadero caos musical que la dejó en evidencia frente a millones de televidentes. Trágame tierra.
1. El «pezóngate»
Y llegamos al número uno de los fails de cantantes sobre el escenario: la «despechada» presentación de Janet Jackson y Justin Timberlake en medio del medio tiempo del Super Bowl 2004, y que llegó a convertirse en el mayor escándalo de la liga de fútbol americano en 50 años.
Más de cien millones de telespectadores presenciaban el show de ambas estrellas en el masivo espectáculo deportivo, cuando Timberlake «accidentalmente» rasgó con su mano el traje de Jackson dejando al descubierto uno de sus pechos. La música siguió sonando pero el desconcierto de ambos artistas era evidente. Y lo que vino después fue lo peor: cientos de demandas contra la NFL, la cadena televisiva y los mismos artistas por los daños y perjuicios provocados a los sensibles televidentes norteamericanos que quedaron traumatizados luego de presenciar el llamado «pezóngate».