Prince, uno de los grandes iconos del pop, nos ha dejado este viernes. Tenía solo 57 años, y llevaba varias semanas enfrentándose a lo que parecía una fuerte gripe que le obligó a ser atendido de urgencia y a cancelar varios conciertos.
Medía menos de un metro sesenta, pero para muchos era considerado un genio. Cantante, compositor y músico, para muchos Purple Rain y Little Red Corvette supusieron un antes y un después en su era.
Hasta su último día, el excéntrico artista organizó fiestas en su casa de Minneapolis, donde ha fallecido hoy. De hecho, la última fue el pasado sábado.
En los años 90, Prince cambió su nombre por otro que no se podía pronunciar, al estar hecho de símbolos. Por ello, muchos medios comenzaron a llamarle TAFKAP (The Artist Formerly Known as Prince) o simplemente The Artist. En la misma época, se tatuó en su mejilla la palabra “esclavo” como protesta ante las condiciones de contrato exigidas por su sello discográfico.
Nacido con el nombre de Prince Rogers Nelson, el cantante sabía sorprender a los fans y a la prensa, yendo siempre un paso por delante. Además, su vida romántica fue muy agitada: desde Madonna a Kim Bassinger o Carmen Electra. Se casó dos veces: con una bailarina de Puerto Rico, Mayte García, y con Manuela Testolini Nelson.
Han sido muchos los famosos que han lamentado su muerte. Su ex, Madonna, ha sido una de ellas, escribiendo en Instagram: “Él cambió el mundo. Un verdadero visionado. Estoy devastada. Esto no es una canción de amor”.
También se unieron a los homenajes otros tantos, como Katy Perry, Justin Timberlake, Alejandro Sanz o Gloria Trevi.
El emblema del pop preparaba sus memorias, que ya nunca verán la luz. Lo que siempre nos quedará será su música.
